El flamante ministro de Comunicación Manuel Canelas asume su tarea con una perspectiva que pretende una forma de comunicar «más eficiente y contemporánea, desde el gobierno».
Del mismo modo, anunció que busca una relación franca, honesta y abierta con los medios de comunicación, y dialogar con la sociedad de manera más eficiente y contemporánea, así anunció Canelas que será la proyección del trabajo en esta área.
Asimismo, destacó fundamental «aceitar mejor los canales de comunicación, los códigos estéticos, el lenguaje de comunicación de lo que hacemos como Gobierno, porque nuestra sociedad está cambiando más rápido que nuestro proyecto».
Los gobiernos «van perdiendo un poco la sintonía con la calle, siempre la calle cambia un poco más rápido que los gobiernos, y siempre la calle innova y utiliza mecanismos de comunicación más vanguardistas que el Estado», dijo Canelas anoche, en una entrevista con Todo a Pulmón.
Habiendo trabajado en ATB, el ministro Canelas anunció los lineamientos de trabajo que proyecta; partiendo desde que considera que los gobiernos van perdiendo la sintonía con la calle, y que los procesos en la sociedad muchas veces van más rápido. Por eso agrega «la calle innova y utiliza mecanismos de comunicación más vanguardistas que el Estado».
«Cuando nosotros hemos descubierto el snapchat, la gente ya tiene el tic toc; cuando nosotros creemos que Twitter la rompe, ves que Twitter está cayendo en su uso en Bolivia y que está subiendo el instagram», puntualizó.
Añadió también que la comunicación que se trabaja desde el gobierno será lo más contemporánea posible, para que la gente la asimile, la critique, la apoye, pero entienda que se está hablando en el mismo lenguaje.
La juventud, un sector reivindicado por el MAS
Tanto el nombramiento de Manuel Canelas como ministro de Comunicación, así como el de Adriana Salvatierra como presidenta de la Cámara de Senadores, marcaron un hito en la historia de Bolivia.
No solo por tratarse de ser jóvenes, sino por pertenecer a colectivos que nunca habían sido elegido para ocupar cargos de tal magnitud; a ser mujeres, parte del colectivo LGTBI y sobre todo referentes jóvenes, que refuerzan la renovación que se adapta a los tiempos que corren.
Por otro lado, brinda una oportunidad a los jóvenes, desmitificando los sentidos construidos que muchas veces se depositan sobre esta franja etaria. /NQ
ANF
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