La justicia le saca tarjeta roja al exfutbolista y exalcalde de Cobija Luis Gatty Ribeiro. Durante el fin de semana se le revocaron las medidas sustitutivas que le fueron otorgadas por un caso de presunta corrupción durante su gestión y se dictó una orden de aprehensión emitida por un juez del Distrito Judicial de Pando.
Según el diario La Perla del Acre, de Pando, Ribeiro se declaró en la clandestinidad, después de haber sido acusado por incumplir una orden judicial, como la presentación cada semana en la Fiscalía para firmar un libro de control, presentar dos garantes personales y arraigo. El tema también alcanza a José Bernardo Condori Lazo de la Vega, exdirector de la Unidad de Aseo Urbano de la Alcaldía de Cobija.
“Ambos exservidores públicos tenían la obligación de cumplir algunos requisitos para beneficiarse con las medidas sustitutivas a la detención preventiva, nacional, lamentablemente no cumplieron, ahora se dispuso la detención preventiva”, explicó Ignacio Condori, fiscal asignado al caso.
A Ribeiro se lo acusa por los presuntos delitos de incumplimiento de deberes, conducta antieconómica, uso indebido de influencias y negociaciones incompatibles con el ejercicio de funciones públicas.
Las denuncias contra Ribeiro datan de 2020, cuando la la Procuraduría del Estado en Pando denunció supuestos delitos medioambientales en la comunidad de Villa Fátima, donde la basura era vertida al botadero sin cumplir con los procedimientos adecuados.
Asimismo una Acción Popular presentada por José Luís Vargas y otros vecinos del municipio contra Ribeiro, Condori y otros funcionarios, ratifica el mal manejo de los residuos sólidos que eran vertidos y quemados sobre la carretera, causando enorme contaminación, según el reporte emitido desde Pando.
No se descarta que Ribeiro esté fuera de Bolivia.
Por otro lado, el fiscal también explicó que el proceso contra Ribeiro es por un supuesto daño económico de 500.000 bolivianos a la Alcaldía, por la compra de diferentes artículos que fueron sacados a nombre del municipio de Cobija y que “no han llegado a la Alcaldía”.
FUENTE : EL DEBER
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