Una semana después, nadie explica el exceso de muertes

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El domingo 6 de septiembre, el Servicio de Registro Cívico (Sereci) publicó sus datos relacionados a la cantidad de decesos registrados en el país desde el inicio del año. Los mismos evidenciaban 19.269 muertos más hasta el 31 de agosto que los registrados en 2019.

Es decir, en 2019, un año promedio y similar a los últimos cinco años, según los mismos datos del Sereci, se registraron 37.271 decesos hasta el 31 de agosto, pero en 2020, se han registrado 56.540. Hasta esa fecha, Bolivia solo tenía registrados 5.027 decesos por Covid, por lo que faltaría una explicación para los más de 14.000 restantes.

En plena pandemia y tal como han hecho países del entorno, es previsible inferir que el exceso de muertos está relacionado a la pandemia, sin embargo, desde la Unidad de Epidemiología del Ministerio de Salud y desde el pleno del Gobierno, el asunto ha sido silenciado.

Solo Santa Cruz, a raíz de los datos, que ya había publicado dos semanas antes The New York Times, inició una investigación por la que se incorporaron 1.570 decesos en los datos del departamento. La metodología empleada es común en epidemiología.

La consolidación de datos ha sido observada puesto que no se incorporaron los mismos casos como positivos, lo que generó una distorsión, por ejemplo, en el total de casos activos en el país, de donde se eliminaron de un plumazo esos 1.570 decesos incorporados.Con todo, el propio Jefe de Epidemiología, Virgilio Prieto, remitió una carta al Servicio Departamental de Salud en el que pedía mayores explicaciones y afeaba la conducta, al mismo tiempo que hacía observaciones sobre el efecto que tenía sobre la letalidad del virus en el país y en Santa Cruz. La carta ha sido catalogada como “política” por parte de diferentes expertos, que han animado a continuar con la investigación de los casos para sincerar los datos.

Mitos y datos

Los datos reportados por el Sereci eliminan, primero, el mito de que ahora “todos mueren por Covid”, pues de los 56.540 registrados en el país hasta agosto, solo 5.027 han sido registrados como consecuencia del virus. El exceso de muertes no es común. Al contrario, las defunciones son bastante estables en un país como Bolivia.

El promedio de decesos en el mes de julio entre 2016 y 2019 es de 4.601 personas, sin embargo, en este 2020, en el que julio ha sido uno de los peores meses de la pandemia, el dato registrado ha sido de 17.327 personas fallecidas, de las que solo 1.854 en ese mes han sido contabilizadas en el dato oficial de decesos por Covid. Algunos voceros del Gobierno, y curiosamente de la alianza Juntos, han cuestionado los datos del propio Sereci aseverando que las muertes se pueden registrar en cualquier momento y no de forma inmediata, por lo que hay que esperar al consolidado, aunque esa lógica solo haría que hubiera un mayor exceso de muertos.

Por departamentos

No todos los departamentos tienen el mismo problema con la contabilización de sus muertos por Covid y en total.

Entre los más afectados por un “exceso de muertos” no explicado está La Paz, Cochabamba y Santa Cruz, aunque este último modificó datos en septiembre.

En La Paz, en promedio entre marzo y septiembre de 2016 a 2019 se registraban 8.437 decesos, pero en este 2020 se han registrado más del doble: 16.945. De los 8.508 muertos excesivos solo 715 se explican por Covid, por lo que resta explicación para 7.793. En Cochabamba, el promedio de esos meses en esos años era de 4.795 pero se han registrado 7.576. Cochabamba sin embargo era de los departamentos con mayor tasa de letalidad con 915 decesos registrados a 31 de enero, por lo que faltaría explicación para 1.840.

En Santa Cruz el dato esperado rondaba los 5.931 decesos, pero se registraron casi el doble: 10.651. De ellos, a 31 de agosto tenía registrados 1.831 y faltaban por explicar 2.889. Su investigación aclaró 1.570.

En Tarija, que esperaba 1.271 decesos entre marzo y agosto registró 1.564, de los que 200 fueron por Covid, por lo que faltaría explicar 93.Otros departamentos muy afectados inicialmente por la pandemia, como Oruro y Beni, registran un exceso de muertos sin explicación de 530 y 1.023 respectivamente. Por su parte, Chuquisaca, que tiene uno de los índices de letalidad más altos, solo tiene 29 decesos de exceso, Potosí 80 y Pando ninguno. Los expertos indican que no todos los enfermos de Covid se reportan al sistema y muchos mueren sin posibilidad de hacer un PCR. Además, los protocolos que obligan a la incineración también han llevado a las familias a ocultar las causas y optar por entierros en cementerios ilegales.

Tarija, en cabeza del reporte nacional

 El Servicio Departamental de Salud (Sedes) de Tarija reportó 2.489 contactos en observación, 141 notificados, 100 descartados, 284 confirmados, 178 recuperados y cinco decesos por Covid-19 en el departamento la jornada del domingo 13 de septiembre.

De la cifra de personas que perdieron la vida por Covid, cuatro pertenecen a Cercado y una a Bermejo. De esta manera, Tarija fue el departamento que más nuevos contagios reportó en la jornada del domingo.Hasta la fecha los reportes acumulados suman 18.006 notificados, 7.519 descartados, 116 sospechosos, 4.671 activos, 5.449 recuperados y 251 fallecidos.


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