Industriales se verán obligados a parar por falta de permisos de circulación.

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El presidente de la Cámara Departamental de Industrias de La Paz (Cadinpaz), Raúl Crespo, reclamó por las demoras que se vienen registrando, en la otorgación de permisos de circulación a las empresas industriales que deben movilizar sus vehículos de distribución de productos y de transporte de sus trabajadores, por lo que se verán obligados a parar su producción.

“Si bien, varias autoridades de gobierno han señalado y continúan sosteniendo que las empresas que producen alimentos, fármacos y productos esenciales para la población deben trabajar ininterrumpidamente, desde el inicio de la cuarentena total en el país, lo único con lo que los industriales paceños nos hemos encontrado han sido dificultades insuperables para obtener los permisos de circulación necesarios. Hay una absoluta descoordinación y desconocimiento, por parte de los efectivos policiales y militares que controlan las calles, de las normas que han sido emitidas. Esto ha derivado en hechos de prepotencia y hasta amedrentamiento contra las empresas que lo único que pretenden es mantener cierto grado de normalidad en su trabajo y el abastecimiento de los mercados” sostuvo.

Destacó que, a pesar de haber establecido dificultosamente ciertos canales de comunicación con las autoridades a cargo de la emisión de los permisos de circulación y haber cumplido con las instrucciones recibidas para enviar información que permita priorizar la extensión de dichos permisos a las empresas industriales conceptuadas prioritarias en el DS 4200, todas las gestiones han sido inútiles y han derivado en que dichas empresas se encuentren en una total incertidumbre.

Aseguró que esta situación, las lleva, en muchos casos, «a decidir parar su trabajo» para precautelar a sus trabajadores y sus propios bienes.

El Presidente de Cadinpaz señaló que, en este contexto, cualquier problema con el abastecimiento de los mercados paceños está fuera de la responsabilidad de las empresas que, hasta último momento, esperaron pacientemente a ser tratadas con la prioridad que, supuestamente, se les ha asignado encontrándose, más bien, con una realidad totalmente diferente.


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