Dirigentes de El Alto se acusan por incumplimiento de cuarentena.

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Los dirigentes de las tres federaciones de juntas vecinales de El Alto se acusaron mutuamente de ser los responsables del incumplimiento de la cuarentena dispuesta por el gobierno para intentar evitar el aumento de los contagios de coronavirus en el país.

Basilio Villasante, es uno de los ejecutivos de la Fejuve y es señalado como afín al Movimiento Al Socialismo (MAS). Él rechaza esta sindicación y refiere que la alcaldesa de El Alto, Soledad Chapetón, busca acuerdos con dirigentes afines a Unidad Nacional (UN), que es el partido de la autoridad edil, y no escucha a los «verdaderos alteños«.

Según el dirigente, la principal razón para que la gente no cumpla la cuarentena obligatoria es que ellos deben salir a buscar los ingresos con los que subsisten todos los días.

«La Alcaldía y el Gobierno creen que con imponer todo van a lograr que la gente recoja sus cosas, no, no es así, aquí todos comemos cuando ganamos y cómo vamos a subsistir si no hay ingresos, nadie nos ha dicho eso», dijo Villasante sobre esta resistencia.

Néstor Yucra, presidente de la otra «Fejuve orgánica», dijo que los problemas son provocados por militantes del MAS que siempre buscan generar conflictos y que buscan que se mantenga una imagen caótica de la ciudad de El Alto.

«En Senkata está el propio presidente de la Cámara de Diputados, señor (Sergio) Choque que es el que agita a la gente, entonces no pueden decir que no son ellos. No son los vecinos los que agreden y hostigan son personas pagadas de otras zonas», acusó el dirigente alteño.

En entrevista con EL DEBER, el presidente de los diputados admitió que él es vecino de Senkata y que su casa fue amenazada durante los días de conflicto en octubre y noviembre de 2019.

Yucra también es señalado de ser parte del grupo de Chapetón. Este dijo que su labor es institucional y que fue en esa condición que se alcanzaron acuerdos con la Alcaldía de El Alto para formar los grupos de prevención en esa ciudad.

Villasante relató que las dos noches que hubo problemas con la Policía, miércoles y viernes de la semana pasada, se debió a algunos miembros de la alianza Juntos, que postula la candidatura presidencial de Jeanine Áñez, intentaron colocar gigantografías en la ex tranca de Río Seco y en Senkata, justamente.

«Ellos (los del Gobierno) piden respeto a la cuarentena y en plena cuarentena estaban colocando su gigantografía, de paso estaba la Policía y no decía nada. De eso la prensa no informa, esa fue la razón de la reacción de la gente; las huellas de lo que digo están en esos lugares», aseguró el dirigente.

Asimismo, dijo que ellos nunca fueron convocados para socializar las restricciones y nuevamente pidió que propongan cómo van a sustituir la alimentación diaria de los pequeños comerciantes que salen a las ferias.

EL DEBER visitó la zona de Senkata donde los efectivos del regimiento Ingavi controlaban el mercado del puente. En el tercer día de cuarentena, la circulación era menor a la que se registro el lunes, refirieron algunos vecinos. Pero, aseguraron que por la mañana el comercio fue normal y que se realizan las ferias, pese a la presencia de policías. 

Mientras personal de la Alcaldía de El Alto repartía volantes a las tiendas de barrio y almacenes pequeños para hacerles conocer las restricciones y los horarios que podían atender.

La alcaldesa Soledad Chapetón informó el martes que buscan acuerdos con los dirigentes gremiales, principalmente, para acordar los términos de la restricción. La noche del lunes, luego de la reunión con el Gobierno, se acordó que por el momento no se aplique un estado de excepción en estas conflictivas zonas.




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