Romero reaparece, desde el MAS le dicen ‘Judas’ y Morales lo respalda

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El exministro de Gobierno, Carlos Romero reapareció en La Paz. Este hecho desnudó que le queda muy poco apoyo dentro del MAS, y casi ninguno de los sectores sociales que incluso le dijeron ‘Judas’.

Un equipo de prensa español lo localizó en Sopocachi el mediodía del miércoles, con lo que quedó confirmado que no está refugiado en la embajada de Argentina, como se decía, ni salió del país. Pero, en ese momento comenzó el vía crucis de la exautoridad. Por la noche, La Resistencia, un grupo de activistas que se movilizaron contra el Gobierno de Evo Morales, lo ubicó en otro domicilio en el barrio Auquisamaña, zona Sur de La Paz, y desde entonces montaron una vigilia en el lugar, similar al que rodea la embajada de México. Así que está acorralado y no puede salir.

Horas después, casi a las 17:00 de ayer, el expresidente Evo Morales lanzó un twit desde Buenos Aires: “Responsabilizamos de lo que pueda pasar con la vida del compañero Carlos Romero, quien se halla cercado en su domicilio por grupos paramilitares promovidos por el Gobierno de facto de #Bolivia con apoyo de la Policía”.

Pero en realidad, precisamente el Gobierno de Jeanine Áñez advirtió que aunque hay procesos en su contra, el exministro de Gobierno no tiene una orden de aprehensión, y que por eso puede circular libremente, declaró este jueves el ministro de Gobierno, Arturo Murillo.

“Hay que dejar claro que no estamos persiguiendo a la gente porque se nos ha ocurrido. Donde tenemos pruebas y acusaciones claras y donde hay órdenes de apremio estamos ejecutándolas. Carlos Romero no tiene más denuncias”, insistió Murillo, mientras que su viceministro de Seguridad Ciudadana, Wilson Santamaría, advirtió que la imagen del periodista español tras Romero “refleja que no se manejan las cosas como antes, que no hay persecución política, que hay gente que puede circular con todatranquilidad”, aseguró.

El viceministro apuntó que se entiende que la ciudadanía hubiera decidido autoconvocarse para generar la vigilia fuera de la casa de la exautoridad, “pero este es un Gobierno que cumple la ley y garantiza los derechos fundamentales: libertad de expresión, el debido proceso y la presunción de inocencia”.

El ministro Murillo recalcó que “si un juez ordena su detención, nosotros tenemos que actuar (…) somos un Gobierno de transición, no somos como el MAS que se alzaba periodistas, albañiles solo porque pensaban diferente a ellos”, aseveró.

Al pronunciamiento del exmandatario Morales se sumó el del diputado Édgar Montaño, que aseveró: “A eso le llamamos nosotros persecución política. La Policía ni la Fiscalía no le encontró nada y resulta que gente oficiosa va a hacerle una carceleta y no puede transitar, lo dijo el ministro Murillo”.

Hasta ahí el apoyo. La diputada Sonia Brito manifestó que hay un esfuerzo de algunos sectores de mostrar división dentro del MAS. “Por eso se quiere hacer crecer discrepancias internas normales en cualquier partido tan grande como el nuestro”, afirmó.

Sin embargo, no quiso emitir una opinión en específico sobre el caso de Romero. “Las observaciones las voy a debatir en el ámbito interno. Este es un tema orgánico, no público”, dijo.

El dirigente del Movimiento Al Socialismo (MAS) en Santa Cruz, Rolando Cuéllar, dijo que es un traidor. “El señor Carlos Romero es el sapo del MAS y no vamos a descansar hasta no verlo en la cárcel y que rinda cuentas por todos sus delitos”. Dio plazo de cinco días para que sea sometido ante la justicia, “caso contrario nosotros mismos vamos a denunciarlo para que sea detenido”, manifestó.

Fue más allá. “No se olviden que Jesús tuvo sus 12 discípulos y Judas fue el traidor, ese es Romero. Con el presidente Evo Morales, el traidor fue el señor Carlos Romero”, advirtió.

El máximo dirigente de los Ponchos Rojos, Pedro Lucana, coincidió plenamente con Cuéllar. “Por supuesto que es un Judas, qué más se le puede decir. quién mandó a (Luis Fernando) Camacho) del aeropuerto a la ciudad, quién le hizo escapar. Las organizaciones lo vemos como un traidor al proceso de cambio. Estamos esperando el 22 de enero, y nos movilizaremos”, señaló.

El dirigente de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia, Jacinto Herrera, dijo que “algunos ministros hicieron mal uso del poder que el expresidente les dio y Romero es uno de ellos. Evo confió demasiado en él y en todos, y ellos se equivocaron mucho, se lo dijimos en su momento”.


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