Violó a su hija y se castigó hiriéndose los genitales.

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Dos adolescentes, que durante años fueron abusadas sexualmente por sus padres, decidieron dejar de callar y denunciaron a los agresores. En uno de los casos, un agricultor de Guarayos violó a su hija por cuatro años, al punto de que la menor quedó embarazada y dio a luz a un bebé que falleció a los pocos meses.

El otro hecho se reveló en la zona de Los Lotes, donde un padre abusó de su descendiente durante ocho años y ahora es padre y abuelo al mismo tiempo, de un niño de tres años.

Además de estos hechos, en lo que va de este año se han conocido otros tres casos de menores que han sido abusadas por sus propios familiares o gente de su entorno: en La Guardia, una niña de 10 años dio a luz a una bebé, hija de su padrastro, y otra de 17 años quedó embarazada de su padre; mientras que, en la Villa Primero de Mayo, una niña terminó embarazada tras los abusos de su tío y de su hermano.

El caso de Guarayos

Una adolescente de 17 años era ultrajada sexualmente por su padre desde que tenía 13, quedó encinta fruto de las agresiones incestuosas y dio a luz a un bebé, el cual falleció a los ocho meses de nacido por problemas de nutrición.

Tras soportar años de abuso de su progenitor, la menor terminó confesando a sus familiares lo que sucedía y estos denunciaron a Evaristo L. S. (34), de ocupación agricultor.

El hecho ocurrió en la comunidad Ipanaru, de la provincia Guarayos. Al verse descubierto, el hombre salió de su pueblo y emprendió viaje hacia Santa Cruz, pero estando a medio camino tomó un objeto punzo cortante para extirparse los genitales.

Un transeúnte, al verlo desmayado y desangrándose en el puente de Puerto Paila, dio parte a la Policía Caminera que lo trasladó al hospital de Cotoca.

El comandante del Santuario, Eduardo Claure, señaló que en primera instancia los policías y el personal del hospital creyeron que se trataba de un herido en accidente de tránsito, que había sido atropellado y abandonado.

Sin embargo, se sorprendieron al escuchar la confesión del herido, de que, tras conocerse la denuncia en su pueblo, había salido hacia Santa Cruz y que el dinero solo le alcanzó para llegar hasta Paila. El hombre, además dijo que se provocó las heridas con un objeto punzo cortante para autocastigarse por lo que le había hecho a su hija.

Los agentes policiales, tras cruzar información con sus camaradas de Guarayos, corroboraron que existía una denuncia y lo trasladaron a la capital de esa provincia para que responda por sus actos ante un juez.

Condenan a 25 años a otro padre.

En otro hecho similar, un hombre de 43 años y de ocupación albañil, fue sentenciado a 25 años de prisión tras ser denunciado de haber abusado de su hija desde sus siete hasta sus 15 años, con el agravante de que la menor dio a luz a un hijo que ahora tiene tres años de edad.

Según la denuncia, los abusos empezaron cuando la madre de la niña falleció y quedó a cargo de su padre y sus tres hermanos. Todos vivían en una casa alquilada en la zona de Los Lotes.

Ayer, el hombre se sometió a un procedimiento abreviado reconociendo ser autor del delito de violación agravada, que le imputó la fiscal Alejandra Dávalos y el juez César Castro lo condenó. Durante la audiencia, el sujeto reconoció los hechos y pidió perdón a la menor.

ElDeber


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