Son 10 kilos, 22 en total, incluyendo el peso del envase. El gas licuado de petróleo (GLP), pese a que prohíbe ser empleado como un carburante de vehículo continúa siendo usado por los transportistas, aunque su uso disminuye notablemente.
La Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), dispuso que el funcionamiento de un vehículo a GLP está prohibido y es considerado un “atentado público” que pone en riesgo la vida de los usuarios como del mismo conductor, porque técnicamente en el país no hay condiciones de conversión a este tipo de combustible.
Tránsito
El director departamental de Tránsito, Transporte y Seguridad Vial, Víctor Velásquez Almazán, destacó que aún sigue vigente el Decreto Supremo 675 para eliminar el uso de GLP en vehículos.
Explicó que la normativa otorga a la Policía, el derecho de proceder al decomiso y la destrucción pública de los kits como de los instrumentos que son empleados para que un vehículo funcione a GLP.
“Está prohibido el uso del GLP como carburante de vehículo, ya sea particular o público, hay una normativa que viene de 2005, un decreto supremo que ha dispuesto la prohibición del uso del gas licuado de petróleo en los vehículos”, dijo.
Destacó que con anterioridad hacían operativos específicos para verficar el uso del GLP, porque era elevado el número de vehículos que hacían el uso de este combustible.
En la actualidad, ante la disminución de esta prohibición, en los controles rutinarios, los efectivos policiales tienen la orden de verificar que el vehículo no esté funcionando con garrafas.
“Es mínimo, casi nada, no existe en el trasporte el uso de este carburante, porque ha sido remplazado por el GNV”, dijo.
Sin embargo, en caso de encontrar vehículos usando este carburante, Velásquez indicó que proceden al decomiso y la destrucción de la garrafa en coordinación con la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), además de emitir una multa al propietario.
Velázquez hizo un llamado a los transportistas que todavía estén usando el GLP como un carburante de vehículo, advirtiendo que, aparte de violentar leyes nacionales, están poniendo en riesgo su vida como la de sus pasajeros.
Recordó que en la ciudad de La Paz ocurrieron accidentes trágicos que incluso cobraron vidas humanos por usar el GLP como un carburante de vehículo.
Transporte
El ejecutivo de la Federación del Autotransporte 15 de Abril, Damián Castillo Villarubia, coincidió con el director de Tránsito, de que si hay vehículos que todavía operan usando GLP, son “pocos”.
Desde que iniciaron las conversiones vehiculares a gas natural vehicular (GNV), el transporte sindicalizado ya no usa GLP.
“Tal vez hay algunos que trabajan clandestinamente, pero que tengamos conocimiento de nosotros, no”, aseguró.
GLP de uso doméstico
El GLP es una mezcla de hidrocarburos, compuesta sobre todo de propano y butano, que por su densidad pesan más que el aire.
El GLP en garrafas de 10 kilogramos en Bolivia es de uso doméstico. Es un combustible que sometido a presiones que se transforma en líquido. Es envasado en cilindros de acero con costura –garrafas- aptos para el almacenamiento y el transporte de GLP.
En contacto con el aire puede producir una mezcla explosiva. Es inflamable, por lo que una fuga es muy crítica; al ser más pesado que el aire se acumula en el nivel del suelo, donde pueden caer chispas que lo inflamen al instante.
Los cilindros de GLP deben ser mantenidos en lugares con ventilación permanente, para no permitir la acumulación de monóxido de carbono, que puede ocasionar asfixia a las personas.
Las empresas distribuidoras encargadas de la venta de GLP deben manipular las garrafas con responsabilidad, evitando golpes, caídas, si las garrafas están almacenadas, el lugar debe estar ventilado, no exponer al sol. (eP).
Datos:
De acuerdo a Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos, una garrafa tiene una vida útil de diez años, luego de ese tiempo, el envase debe pasar por un control en el que verifica que no exista fuga, malformaciones en el envase, que resista la presión a la que se contiene el GLP en el envase.
elPeriodico.
Comentarios