Poco interés en hacer los deberes, no prestar atención en el aula y faltar a clases por cualquier motivo pueden ser algunas consecuencias de la desmotivación en el estudio, lo que es un motivo de preocupación para muchos padres.
La segunda semana de inicio de clases es el momento perfecto para incentivar a los hijos a cumplir las actividades escolares y así tengan un buen rendimiento académico el resto del año. Para lograr este objetivo, el psicólogo y pedagogo Luigi Céspedes comparte algunos consejos para motivar adecuadamente el estudio en el hogar y el colegio.
También es importante evitar prácticas que perjudiquen el desarrollo de este hábito, como suspender el estudio por tiempos largos y dar la percepción de que éste es un castigo.
1. Enseñar con el ejemplo
Una de las principales claves de la motivación es dar el ejemplo.
El hábito de estudiar debe partir en el hogar como un trabajo regular. “No puedes enseñar algo que tú no sabes”, recomienda el psicólogo.
Los estudiantes deben percibir que todos los integrantes de su familia realizan sus deberes y tareas.
2. Espacio de estudio
Existen elementos que estimulan los procesos psíquicos de atención y concentración, entre estos están el orden del lugar, la existencia de materiales suficientes y adecuados y la iluminación correcta, apunta Céspedes.
3. Ausencia de distracciones
A la hora de estudiar evitar cualquier tipo de distracciones, ya que esto puede generar la procrastinación, que es postergar alguna actividad con excusas que se plantea uno mismo.
Para esto acondicionar el espacio de trabajo de acuerdo a los gustos y preferencias de la persona, pues cada uno conoce su propio proceso de aprendizaje.
4. Premios adecuados
Si se espera que el estudio forme parte de los hábitos y costumbres de los jóvenes, se les debe dar premios que fortalezcan la satisfacción por realizar los deberes y no videojuegos, juguetes o celulares que pueden dar la idea que el estudio es una especie de castigo.
“Un elemento que puede ayudar en la motivación de realizar la tarea es la satisfacción de hacerla, es decir, que la conclusión de la tarea represente un éxito personal”, indica Céspedes.
Esa manera de motivar, como explica el experto, se refiere a la existencia de un refuerzo positivo que a su vez logra reconocimiento personal y también de parte de los padres. “Esto le ayuda a saber que estos premios van en función de una interiorización de valores y no en una satisfacción inmediata”, añade.
5. Involucramiento de los padres
Uno de los errores comunes es que los padres realicen los deberes escolares de sus hijos, práctica que genera efectos negativos.
“Cuando el padre hace la tarea, no da a oportunidad a que el estudiante sienta la satisfacción de terminar los deberes”, comenta Céspedes.
Recomienda a los padres propiciar espacios de estudio, realizar el apoyo necesario y en algunos casos conversar con los profesores.
6. Sin presión ni frustraciones
No exponer a los jóvenes a un tiempo de estudio que cause frustración. Éste debe adquirirse con tiempo y hábito. Del mismo modo, inculcar la importancia de concluir un deber para evitar frustraciones.
7. Mantener la motivación
Para generar el hábito del estudio es preciso establecer horarios, programar el tiempo para realizar una determinada tarea y crear metas a largo plazo.
“La obtención de un buen rendimiento al final del año debe descomponerse en actividades y tareas más especificas”, explica Céspedes, pues la realización de deberes más precisos permite ver el avance y el cumplimiento de la meta trazada.
8. Vacación
El psicólogo asegura que en muchas familias el significado de vacación es no hacer nada o dejar de lado el estudio. “La vacación debería entenderse como un descanso del proceso escolarizado, es decir , la vacación es descansar del proceso escolarizado, pero no del estudio”.
Por lo que recomienda que en época de vacaciones se asigne un tiempo al estudio. “De esa manera nos aseguramos que sea una constante en su vida y que el estudiante sepa que debe responder a ello permanentemente”, explica.
Para lograr esto, los jóvenes deben aprender cosas nuevas, reforzar y avanzar las que ya se conocen y aplicar esos conocimientos en el día a día.
RETOS PERSONALES
La motivación es un aspecto psíquico de orden y predisposición del sujeto que permite su movilización hacia algo.
“Cuando hablamos de motivar el estudio en los hijos, se alude a que él desarrolle una capacidad de autogestionar sus procesos de aprendizaje por hábito y costumbre y las integre favorablemente”, comenta el psicólogo Luigi Céspedes.
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